• Marie de Sainte-Hermine

    Una familia de bandidos en 1793

    16,90

    SINOPSIS

    Resulta difícil no emocionarse varias veces al sumergirse en esta narración —a medio camino entre la novela de aventuras y el relato autobiográfico—, atribuida en un principio a Jean Chaurrau, el jesuita que la llevó a la imprenta. Sin embargo, en las últimas ediciones francesas es más común, y más justo, encontrar el nombre de María de Sainte-Hèrmine como autora. Ella misma explica en las primeras páginas el objetivo que le movió a escribirla: dar a conocer a sus descendientes los beneficios con los que Dios ha colmado a su familia «beneficios amargos, sin duda, pero preciosos a la vez». Es uno de sus nietos quien entrega el manuscrito a Chaurrau con la autorización para publicarlo.

    El conmovedor testimonio de Sainte-Hèrmine nos muestra el Terror de la revolución más allá de la conocida barbarie parisina, porque los cantores de La Marsellesa también perpetraron el primer genocidio moderno, masacrando a toda una región que se resistía a convertirse en esclava de las nuevas ideas. El episodio se llama la Guerra de Vandea (la Vendée) tomando el nombre de la región insurrecta, y «bandidos» llamaron a aquellos nobles y campesinos que se bordaron en las camisas el Sagrado Corazón con una divisa antigua, Dios y el Rey, es decir, lo más proscrito de la Francia revolucionaria. Este libro es la terrible historia de una familia de aquellos memorables bandidos.

    4ª edición ya disponible

  • Jean-Marie Le Pen

    Hijo de la nación

    19,90

    SINOPSIS

    Si uno hubiese de elegir una palabra que definiera con tino la vida de Jean-Marie Le Pen, probablemente se decantara por “trepidante”. Al fin y al cabo, en noventa y dos años ha hecho más cosas que las que cualquier hombre corriente podría hacer en mil. Tras haber perdido a su padre cuando no era más que un adolescente, durante la II Guerra Mundial, el protagonista de estas memorias empuñó las armas en Indochina y Egipto, fue el miembro más joven de la Asamblea Nacional durante la década de los 50 y fundó un movimiento político para defender la Argelia francesa en los 60.

    El libro que el lector tiene entre manos relata la infancia, la adolescencia, la juventud y los primeros años de la edad adulta de uno de los políticos más controvertidos y carismáticos de la segunda mitad del S.XX. Pero no conviene pensar en las típicas memorias de un político, casi siempre frías y repletas de acartonados formalismos. Estas son bien distintas, pues el autor las ha escrito con la misma naturalidad con que se dirigiría a un buen amigo suyo en un lugar cualquiera. No encontraremos aquí frases medidas al milímetro ni opiniones medrosas llamadas a agradar a hombres moderados. Al contrario, cada línea, cada frase está impregnada de esa pasión tan propia de quien ama su patria con ardor y, en consecuencia, sufre viéndola languidecer.