-
Gilbert Keith ChestertonJosé Ramón Ayllón
Esencia de mujer
SINOPSIS
No cabe duda de que el feminismo ha sido una de las grandes revoluciones sociales de la historia. Casi todas sus pretensiones aparecieron en Londres y en París durante las primeras décadas del siglo XX. El célebre periodista y escritor G. K. Chesterton las conoció recién nacidas en la capital británica: allí las valoró a fondo y manifestó su parecer sobre cada una de ellas a través de sus numerosos artículos de prensa, así como en sus ensayos, debates públicos y conferencias.
Este libro ofrece una breve y selecta antología de textos —de la mano de José R. Ayllón— sobre las principales cuestiones de la agenda feminista: la libertad y la igualdad de la mujer, su sexualidad y sus derechos, el matrimonio y el divorcio, la familia y la educación de los hijos. La postura de su autor es muy clara: si el primer feminismo conquistó para la mujer el sufragio y la igualdad, el segundo la traicionó al rechazar la maternidad, el matrimonio y la familia.
Gilbert Keith Chesterton, probablemente el periodista más brillante del siglo XX, tenía un excelente olfato para seleccionar sus temas y una argumentación genial para desarrollarlos. Sus escritos aportan grandes dosis de sentido común —salpicado de buen humor—, algo necesario en tiempos de confusión en los que nadie parece saber definir qué es la esencia de mujer.
-
Cardenal Carlo Caffarra
No anteponer nada a Cristo
SINOPSIS
Considero este libro una verdadera joya. No lo digo sólo por su altísimo valor o por la rareza de un pensamiento tan profundo. Este libro contiene, en pequeños retales, las fibras más íntimas del alma de este gigante del espíritu que fue el Cardenal Carlo Caffarra, considerado uno de los mejores teólogos moralistas del momento presente.
Indiscutiblemente el Cardenal Caffarra tenía alma de Quijote, siempre dispuesto a «desfacer entuertos y a socorrer a los huérfanos», los huérfanos provocados por una cultura nihilista que socava las raíces del alma y nos hace perder el horizonte de la verdad y de la eternidad junto a Dios nuestro Padre. Como el Quijote, Caffarra ha sido un hombre libre.
Mi gratitud al cardenal es grande. Para mí él fue un padre, un maestro y un profeta. No dudo que con esta obra, sencilla y profunda, se va a acrecentar el caudal de la cultura católica para todos nosotros, necesitados de ver brillar ante nuestros ojos el esplendor de la verdad.
Del prólogo de Juan Antonio Reig Pla, obispo de Alcalá de Henares